Google
 

viernes, 6 de marzo de 2009

Seguimos tranquilos

En los últimos días se produjeron diversas situaciones de inseguridad que abrieron el debate sobre la pena de muerte. Tratando de buscar un punto de conexión con la teoría económica, recordé que en una de las últimas materias que cursamos con Bob y McCandy tuvimos que presentar un paper de Gary Becker, que se titula “The economic way of looking at behavior”.
Becker presenta un modelo útil para analizar temas que están fuera del común análisis de un economista, y uno de ellos es el crimen. Según él, los delincuentes deciden si cometer un delito o no comparando los beneficios y los costos que dicho delito conlleva. Entre los beneficios están principalmente los objetos materiales que consiguen cuando comenten un crimen. Entre los costos están la probabilidad de ser atrapados y la pena que recibirían en tal caso.
Es decir que un aumento de las penas (en este caso, imponer la pena de muerte para aquellos delincuentes que matan) desincentivaría a los criminales por el aumento en los costos que ello significa. Y además podría permitir algún tipo de equilibrio de las cuentas públicas dado que se podría conseguir un balance entre gastos en seguridad (esto es, probabilidad de descubrir actos delictivos) y, duración y dureza de las penas. Es decir, aumentar las penas y, además, imponer la pena de muerte posibilitaría reducir el gasto en seguridad.
Ahora bien, este enfoque nos permite ir más lejos y entender porqué quienes llevan a cabo crímenes son quienes menos oportunidades tienen. La razón es sencilla: lo que pueden obtener a partir de un acto delictivo es mayor que lo que pueden obtener trabajando, dada su poca educación. Este hecho puede verse reforzado por la poca estabilidad que tienen las familias más humildes.
Por lo tanto, volvemos a un punto que éste blog siempre hizo referencia: la educación. No tengo dudas que una política que promueva enfáticamente la educación, la construcción de escuelas y que tenga como objeto la inclusión de aquellos que tienen menos oportunidades, sería cuanto menos una gran contribución a este tema. Y además, sería un método de prevención más efectivo, en términos económicos, que la pena de muerte porque contribuiría directamente con el crecimiento de largo plazo de la economía.

6 comentarios:

Bob dijo...

Adam,
Bueno felicitaciones por el primer post al regreso.
Si bien estoy de acuerdo en como plantea el tema Becker (a pesar de que se podría ampliar para tener en cuenta más cosas y él lo dice en el paper), que las personas deseen cometer menos crímenes depende de cómo los afecten tanto los ingresos de robar como los costos de ser atrapados.
Es justamente por eso que no sé si imponer la pena de muerte (en Argentina) reduciría la cantidad de crimen a nivel agregado. Según tu postura, la dureza de la pena afecta siempre negativamente al crimen, a mayor dureza menos crimen. Pero qué pasa si, como vemos muchas veces en Argentina, los que deciden robar "están jugados". Esto es decir, no les importa si cuando van a robar terminan muertos, atrapados por la policía o sentenciados a la pena de muerte.
Esta es mi mayor duda en cuanto a adoptar la pena de muerte justificándolo "a la Becker".
Sin duda, hay mayores inconvenientes que también estaría bueno ampliarlos como el problema de la burocracia y cómo esto afectaría a las personas que están sentenciadas a pena de muerte, ni hablar de los problemas de condenar a gente inocente (que Argentina debe estar bien arriba en el ranking) y seguramente otros más.
Es un tema que no he tomado posición aún y que me genera muchas dudas.
Saludos y lindo tema de discusión impusiste para tu primer post.
Bob

Anónimo dijo...

Chicos, salgan del tupper. En el único lugar donde se inició un debate sobre esto es en los foros de LNOL, en cualquier otro lugar civilizado del mundo (salvo un par de retrógrados estados de EEUU) esto es motivo de risa o espanto, no de debate.
Y Adam, "dada su poca educación"... Es una manera un poco simplista de explicar la pobreza, ¿no?

Coki dijo...

@Adam, la refutación a la teoría de Becker es tan sencilla que es el nombre del blog.

Tincho dijo...

Adam yo pensé algo similar a Bob cuando me lo presentaron en clase, hacer mas duras las penas puede hacer que los mas amantes al riesgo sean los que mas crímenes comentan o que se busquen crímenes con pagos mas altos. También esta el punto de que muchos ya están jugados (amantes al riesgo).

Saludos

Anónimo dijo...

Desde una óptica diferente a la económica y más jurídica quiero dar mi modesta opinión en lo que respecta al tema de la pena de muerte que se presenta con tanta actualidad.
Existen diferentes teorías de la pena desarrolladas a lo largo de los años, como las teorías absolutas de la pena en donde la pena alcanza su justificación en sí misma. Dentro de ellas se encuentra la teoría de la retribución de la pena, retribución de la culpabilidad en donde lo que se busca es que la falta del autor sea expiada mediante la imposición de un mal correspondiente a ella, idea que tiene su origen en los pensamientos de Kant que afirmaba que la pena era necesaria “para que uno experimente lo que sus hechos valen” pero que rediseñado busca mantener normas sociales elementales y no generar una justicia superior en la tierra (fin último de la pena).
Las teorías relativas de la pena lo que buscan es de alguna manera prevenir el delito que dependiendo de sobre quien influya, quedará denominada como prevención especial o individual (cuando influye en el propio autor) en donde se busca disuadir al autor de realizar futuros hechos punibles, o prevención general (cuando el objetivo es prevenir la incidencia en la generalidad de las personas). Von Liszt catalogaba a los delincuentes teniendo en cuenta sus personalidades y que pena sería más eficaz en base a ella:
a. Corrigiendo al corregible: resocialización (ideologías re)
b. Intimidando al intimidable
c. Haciendo inofensivos a quienes no son corregibles ni intimidados, lo que nos interesa en este caso que sería la pena de muerte como medio de inocuización
En cuanto a la teoría de prevención general esta es una coacción formulada en abstracto que se concretiza en la sentencia, cuando el juez refuerza la prevención general al condenar al autor debido a que por éste acto está anunciando a los demás lo que les ocurrirá si realizan idéntica conducta (por eso, la lógica de éste criterio exige que las penas sean cumplidas, de lo contrario, el fin intimidatorio se ve afectado).
Existen diferentes ramificaciones dentro de estas teorías y uniones entre ellas que no vienen al caso para explicar mi argumentación.
Una vez diagramadas las diferentes teorías que lógicamente tienen raigambres filosóficas esenciales, se debe analizar los argumentos esgrimidos sobre una teoría en particular, teoría relativa de la pena individual (en este caso pena de muerte).

1- Respondiendo al argumento de que “un aumento de las penas (en este caso, imponer la pena de muerte para aquellos delincuentes que matan) desincentivaría a los criminales por el aumento en los costos que ello significa” respondo que está probado en lo que se conoce como sociología del derecho penal, que la mayoría de los delincuentes no conocen la pena que les corresponderá por el delito que piensan cometer y aún así si la conocieran son pocos los que piensan en ella al momento de planificar el delito(si hubo planificación previa) o al momento de cometerlo. Lamentablemente no tengo la información disponible en la computadora como para probarla con la estadística(prometo agregarla luego)
2- Como prueba del segundo argumento aconsejo entrar en: http://www.amnesty.org/es/library/asset/AMR51/029/2009/es/d77dd2d0-ae56-49c5-a75b-d183579429dd/amr510292009spa.html para avalar de algún modo las acotaciones de Bob (“ni hablar de los problemas de condenar a gente inocente (que Argentina debe estar bien arriba en el ranking”) en donde se prueba que no sólo en Argentina pueden cometerse errores que lleven a la muerte de inocentes.
3- Otro argumento que la apunta más a una cuestión de política presupuestaria está dada por el costo que representa mantener el litigio ante casos de pena de muerte vs. casos de cadena perpetua. Aunque parezca asombroso recomiendo leer la siguiente página en donde se prueba que al estado de California, EE.UU. le cuesta U$S 90.000 más el seguimiento de un proceso de pena de muerte que afrontar un proceso de condena a cadena perpetua http://www.deathpenaltyinfo.org/costs-death-penalty.
4- Último argumento que establece porque no se puede establecer la pena de muerte en la Argentina está vinculado a que nuestro país ratificó la Convención Americana sobre Derechos Humanos que actualmente tiene rango constitucional establecido en el art. 75 inc.22 de la misma en donde se establece que en su artículo 43: “no se restablecerá la pena de muerte en los Estados que la han abolido”. Con lo cual entiendo que el debate en realidad no tendría razón de ser desde un primer momento, aunque a raíz de cierto bombardeo por parte de los medios de comunicación se genere está situación de terror que, según afirmaciones del Ministro de la corte Eugenio Zaffaroni, resultan injustificadas dado que no hay un aumento de la criminalidad en la medida en que se la está retratando.

Saludos a todos y me alegra que hayan vuelto!

Bob dijo...

Mira los comentarios que genera este tema que impusiste en el blog Adam, bastante feroces, largos y hacen que esto se ponga divertido/interesante.
Respondo al último comentario con el que estoy en semi-desacuerdo.
1-Suena muy razonable que los criminales no conozcan la pena que le corresponderá por el delito que piensan cometer y seguramente estará probado (por ejemplo dijeron 5 años de carcel cuando eran 10), pero seguramente tienen una noción al respecto. Sabrán que van a ir a la carcel un tiempo considerable, o mañana me saca mi amigo el intendente, o hay chances de que me toque la pena de muerte. Hay nociones en este caso por más de que un estudio haya probado que no saben la pena exacta. Por otra parte, sería interesante ver como hacen los sociólogos del derecho para probar que si la conocieran la pena son pocos los que piensan en ella?? Así que espero la información para poder discutir algo más concreto.
2-Acá no me queda otra que coincidir ya que es uno de mis argumentos en un comentario pasado.
3-Buen punto el del costo mayor por establecer la pena de muerte y que es un monto importante (en EE.UU.) aunque es complicado comparar como sería el tema de costos acá. Sin embargo, se puede decir que habría que calcular si vale la pena incurrir en un costo. Porque si hay un beneficio (no digo que lo haya como se nota en mi comentario anterior) habría que compararlo con este costo (supuestamente mayor) a ver que es mayor. Dentro de los beneficios podrían entrar vidas salvadas por la imposición de esta mayor pena, menos gastos en seguridad en un futuro y cosas por el estilo. Estos cálculos son siempre de imposibles a muy complicados de realizar pero siempre hay estimaciones razonables.
4-Este punto tendría que haber ido primero y sólo zanjando todo el debate que podemos hacer. Para qué debatimos si no se puede instalar la pena de muerte.
Pero como me gusta discutir, como algunoas sabrán, por ahí la criminalidad no aumentó sino que la gente se cansó de que la criminalidad sea tan alta. Hace poco leí en un diario que en Argentina se cometían 6 asesinatos por día. Más allá de que haya aumentado o no, no es una cifra un poco alta?

Gracias Vicky por los conceptos legales y demostrarnos que no hay de qué discutir ya que no se puede imponer la pena de muerte en nuestro país.

Saludos